Fotos
 Trofeo1 |  Trofeo2 |
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Fotos: José Rafael Centeno
Pabsi Livmar y Jacobo Morales, maestro de ceremonia de la premiación
Pabsi Livmar y Nelson Sambolín, artista creador del cartel del 10mo aniversario del Premio El Barco de Vapor.
Pabsi Livmar y autores ganadores de pasadas ediciones
El Antiguo Casino de Puerto Rico, sede de los actos de premiación
Ángel Antonio, director de la Editorial del Instituto de Cultura de Puerto Rico y presidente del jurado, lee el laudo.
Puesta en escena de Teatro Breve al terminar el acto de premiación
Silma Ivelisse, madre de Pabsi Livmar, lee los afiches de conmemoración del 10mo aniversario
Amigos de Pabsi Livmar
Fotos: Amigos de Pabsi Livmar
Silma Ivelisse Irizarry Pagán: inspiración del personaje Jeremías.
Pabsi con la gran Talía, editora del libro. Como bien dije en mi discurso: "Gracias Talía, no solo por la dedicación y el cariño que le has dado a 'El visitante de las estrellas', sino también a mí. Gracias por tu simpatía y honestidad, por ser el vínculo perfecto entre la editorial y los escritores".
Ana María Fuster Lavín, amiga, confidente, hermana, colega de letras, lectora del libro. Qué gran mujer. Gracias por tanto cariño y apoyo. Su hijo, Miguel, qué niño excepcional.
Amigo, consejero de tesis de maestría y padre putativo. Cuanto amor.
Mi Bunnii. Por años soñamos esto. Gracias por darme apoyo y confiar en mi trabajo desde el primer día. 'Iden' llegará a los estantes pronto. Ya verás.
Y su esposo, Zoilo. Mi amiga de infancia, mi amiga de toda la vida, quien se quedará siempre, quien conoce todas mis historias.
Pabsi Livmar junto a algunos de los escritores ganadores de ediciones anteriores: Janette Becerra, José Rabelo, Samuel Silva Gotay, Tina Casanova y C.J. García.
Parte del homenaje al décimo aniversario del Premio de Literatura Infantil El Barco de Vapor en Puerto Rico.
Mis durakas y compañeras pegeteras-trajumanas: Teresa Córdova y Rosalie Sánchez
Amiga y colega pegetera-trajumana
Sandra Santana y Marie Ramos Rosado
Mi Albertico, quien me tocaba cumpleaños feliz en la ocarina y a quien siempre le deberé alguna referencia a piñas en mis escritos. Te adoro.
Pabsi es zurda y miope.
Gran traductora jurídica y mentora
Una dulzura de mujer.
El entretenimiento de la noche
Yoanna es una de mis primeras lectoras. La conocí, de hecho, después de un concierto. Me la presentaron como escritora y actriz. Nos citamos la semana entrante en un restaurante de San Juan para que me leyera. Por casi dos años nos citamos en el mismo lugar, casi todos los meses, a comer y hablar de historias. Después cada tantos meses, a lo mismo. Siete años más tarde, míranos, celebrando juntas. Gracias, Yoa.
Así me recibieron en El Antiguo Casino
Y Magda Cristina photobomber allá atrás, já
Mis dos amigas
En la premiación, celebrada el 28 de abril de 2017 en el Antiguo Casino de Puerto Rico, el connotado director cinematográfico puertorriqueño Jacobo Morales fue el maestro de ceremonias. Asimismo, el popular colectivo de jóvenes actores de Teatro Breve presentó un paso de comedia que, en clave satírica y crítica, mostró cómo disuadir a la infancia de abrazar la lectura. Los invitados a este encuentro de celebración de la literatura infantil y juvenil fueron agasajados con una reproducción del cartel conmemorativo de la décima entrega del Premio y de esta fiesta de aniversario, comisionado al renombrado artista puertorriqueño Nelson Sambolín.
El visitante de las estrellas, que prevaleció entre 43 manuscritos, fue elegido por unanimidad en diciembre pasado por un jurado integrado por los escritores Awilda Cáez, gerente de invitados del Festival de la Palabra; Juan López Bauzá, José E. Muratti, expresidente del Pen Club de Puerto Rico Internacional; y Ángel Antonio Ruiz Laboy, director editorial del Instituto de Cultura Puertorriqueña. La novela premiada es el primer libro de la joven autora Pabsi Livmar; sin embargo, la también traductora jurídica y audiovisual, bloguera y percusionista tiene ya una trayectoria dedicada al oficio de las letras.
“La autora logra representar muy efectivamente el conflicto interno del protagonista, producto del desencuentro entre los valores de compasión y solidaridad que ha aprendido de su padre y las expectativas de una sociedad que lo conmina a asumir las armas del rechazo y la xenofobia, a convertir en adversario a un ser tan frágil y condenado por las circunstancias como él mismo”, reza un fragmento del laudo.
TOMADO DE: MEMORIA SM 2017